sábado, septiembre 24, 2005

Mi ayer: sobre cómo era el hoyporhoy en ese entonces...

Hoy
Un 10 de abril de tantos
Semana santa por cierto

Cuando imaginé sentirme enfermo
A causa de aquellas dos extracciones
--Exodoncias las llaman ahora--

cuando la TV la radio los periódicos
Internet
Se ocupan del fútbol
Pues ya viene Francia
Todo ahora tiene un toque de París
--si hasta rifan un pan francés--

Cuando Horacio Andrés Noemí Harold
Buscan irse del país
Dentro de cuatro años
Tiempo durante el cual acaerán
Varias tragedias
O milagros
Resta esperar

Cuando todo cambia excepto yo
Y estoy sediento por urgar dentro de mí
Y descubrir lo inencontrable
Y vivir bajo la luz de otra lámpara
Porque esta que hasta ahora alumbra el camino
Lo ha convertido en un eterno túnel
Que se pone más oscuro conforme doy los pasos
Y me sumerje en mi propia sombra

Cuando el niño hace de las suyas
Y todos hoy andan descamisados
Aunque esté lloviendo
A causa del calor
Y en Perú murieron como medio millón quinientos mil
A consecuencia de las inundaciones
Y en Europa no deja de nevar
Y en la Florida sopla fuerte el viento
Y hace volar autos casas gente
Tal ves para que observen el paisaje
Ese desolado

Cuando Cadenalco está en plena expansión
Y Optimo y Próximo
Están entre ceja y ceja de todos
Produciendo millones
Y Rigoberto y Cynthia se preparan
Para ser la nueva generación de directivos
Qué futuro próspero
Y que la tecnología se toma los almacenes
Y es nuestro turno ahora
De demostrar actitudes
Criterio comercial
Y humanidad

Cuando el quinto semestre va viento en popa
Y Mónica con sus piernas
Y Adriana con su corazón
Han sido grandes compañeras
Y los trabajos son agradables por ellas
Y los compañeros se quitan la camisa los pantalones
Al bailar porque los excita
Si hasta uno que otro no-alumno logra hacerlo
Ya porque agrada a las muchachas
Como Cristina o Marielsy
Que son hermosas pero sólo muestran
La sonrisa
Y las tres cuartas partes de sus piernas

Cuando en Buga
Liliana construye su segundo piso
Y la tía Magola se amarga la vida
Al igual que la abuela Inés
Porque no tienen buena cosecha qué recoger
Qué van a tener
Y la única cuerda y desamparada es mi madre
Que me guarda sus misterios
Y angustias y secretos
Y no deja entrever el rostro
Para que no me esfuerce
Qué egoísmo
O deseos de llamar la atención
Lo logra
Ya va a ver

Cuando hay gente que me conoce
Y no conozco
O que antes conocía y a la que ahora esquivo
Sin saber realmente el porqué
Ese extraño miedo que aún no domino
O tal ves aquellas cualidades de líder
Que tengo y no aplico
O que ignoro e intento aplicar
Por ejemplo a Paula Caicedo
O a Diego Chaguendo
O a Fitzgerald Duque
O a Hernán Jaspi
O a Hienz Gómez o a mil más
Que sólo ven aquel escudo
Mi máscara mejor dicho y prefieren ignorarla
Con justa razón

Cuando hago el segundo intento
Y último
Por leer a Og Mandino
Con su
El vendedor más grande del mundo
Y hasta hoy mi segundo día
Sigo a cabalidad las instrucciones
Y espero no aburrirme
A ver si al fin derribo
Ese mundo de murallas
Y logro que José Iván y yo
Seamos hagamos buen equipo
A ver si en máximo dos años
Me voy a hacer aquel curso
Que tanto quiero

Cuando por todo cuanto he escrito
No sólo ahora sino antes
Desde tiempos de Laura Elizabeth
Y mi apreciable tiempo con Isabel Caicedo
Y la actual ausencia de Carolina
He decidido visitar un especialista
En problemas del amor
De mi amor propio
Porque ahora estoy un poco atrasado
Y los días se están yendo
Y como dijo Aldemar Cardona
El tiempo es oro
Y el oro es caro
Y yo lo estoy desperdiciando
Durmiendo sudando
Aquí escribiendo o soñando
Con el hombre en el espejo
Y tantas otras cosas
Así que voy a visitar un especialista
Un poeta tal ves
O a mi reflejo en el agua
Ni modo de decir que a un doctor
No quiero asustar a mi madre

En este escrito está todo el paisaje
El normal y el de mi adentro
Y los días y los ratos
Y hasta los momentos que no existen

Por supuesto no están los que no recuerdo
Faltos de importancia tal ves
O seguramente está comprobada una vez más
Y como casi siempre
La fragilidad de mi memoria

Porque mi padre apenas llega al recuerdo
Pues no hace parte de mi cotidianidad
Y eso lo vuelve un poco inaccequible
O mis dibujos olvidados
Y los aviones que volé
Seis o siete años atrás
Ya no son cotidianos
Y sin embargo los recuerdo
Como los buenos momentos que fueron
Como las cartas que a diario enviaba por correo
Y los dos o tres kilómetros que día a día caminaba
Para llamar en el larga distancia
Y seguir alimentando mis fantasías
Que por cierto nunca dejaron de serlo
O como mis días en Restrepo
Cuando aquel 22 de febrero
Murió al fin aquel fantasma
Y todas las noches de insomnio
Me demacraron hasta los huesos
Y Martha Betancourth se hizo inolvidable
Y mis discusiones con el tío Heberto y papá también

En fin
Ha pasado mucho mar por estas playas
Y resulta de gran esfuerzo
Tener en cuenta el día a día
Y desde ese día hasta hoy
Afortunadamente hay escritos
Recontando mi circular rutina
Digo afortunadamente
No porque sea importante
O pueda interesar a otros
Digo afortunadamente porque el pasado
Es tan esencial como la sombra
Pues ambos inspiran respeto
Y algo de credibilidad a las palabras
Como estas que ahora plasmo
Y puedan quizá servir a cualquier propósito
A cualquier persona
Yo qué sé
Es una esperanza que ha estado siempre abrigada
Al fin y al cabo
Este camino hacia la muerte no debe
Ser en vano
Después de todo
Con estos escritos ya cumpliré
Uno de los tres objetivos existenciales

Imagino que dentro del libro
Hablaré del árbol-sueño
Y de lo protegido que estará aquel niño sueño
Jugando al columpio sueño
Y que cuando se canse sueño
Ira corriendo a buscarme sueño
Y me llamará papá sueño
Y por fin sonreiré tranquilo

Eso es todo
Muchas gracias

Santiago de Cali, 10 de abril de 1998


Peter P@n